Declaración de Fe

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Dios

Existe solamente un Dios verdadero y viviente. El es un ser inteligente, espiritual, y personal, el Creador, Redentor, Preservador, y Gobernante, sobre todo. Dios es infinito en santidad, amor y gracia. Dios es todopoderoso y todo lo conoce. Su perfecto conocimiento se extiende a todas las cosas, pasado, presente, y futuro, de toda su libre creación. El es eterno, existiendo en tres personas y revelados a nosotros como el Padre, el Hijo, y el Espíritu Santo, con distintos atributos personales, pero sin división en su naturaleza, esencia, o ser. [Genesis 1:1, 26-27; Genesis 3:22; Salmo 90:2; Mateo 28:19; 1 Pedro 1:2; 2 Corintios 13:14]

Dios el Padre

Él es un Espíritu personal e infinito, perfecto en santidad, justicia, sabiduría, poder y amor. El tiene una actitud paternal hacia los seres humanos. Él se preocupa misericordiosamente con los asuntos de la raza humana, El escucha y contesta oraciones, y salva del pecado y la muerte eterna a todos lo que vienen a Él a través del Hijo Jesucristo. [Juan 4:23-24; Juan 3:16; Romanos 8:14-15; 1 Corintios 8:6; Gálatas 4:6; Efesios 4:6; Colosenses 1:15; 1 Timoteo 1:17; Hebreos 11:6; Hebreos 12:9]

Jesucristo

Él es eterno, Dios el Hijo, que tiene precisamente la misma naturaleza, atributos y perfecciones que Dios el Padre y Dios el Espíritu Santo. El vino a la tierra concebido por el Espíritu Santo y nacio de la virgen María. Jesús perfectamente revela a Dios y hizo Su voluntad al tomar forma humana con todas sus demandas y necesidades, aun mas, identificándose completamente con la humanidad, pero sin pecado. Jesús se ofreció a si mismo como el sacrificio perfecto por los pecados de toda la gente, muriendo en una cruz en nuestro lugar. El se levanto de los muertos tres días después para demostrar su poder sobre el pecado y la muerte. El ascendió al cielo y esta ahora exaltado a la mano derecha de Dios donde es el Único Mediador, completamente Dios, completamente hombre, en cuya persona se logra la reconciliación entre Dios y la humanidad. El regresara nuevamente a la tierra a reinar como Rey de Reyes y Señor de Señores. [Mateo 1:22-23; Isaías 9:6, Juan 1:1-5; Juan 14:10-30; Hebreos 4:14-15; 1 Corintios 15:3-4; Romanos 1:3-4; Hechos 1:9-11; 1 Timoteo 6:14-15; Tito 2:13]

Espíritu Santo

Él es igual parte de Dios, así como el Padre y el Hijo lo son. El esta presente en el mundo para hacer consientes a los hombres de su necesidad por Jesucristo. El también vive en el corazón de cada creyente desde el momento de su salvación. El provee al creyente con poder para vivir y entender verdades espirituales, y los guía a hacer lo que es correcto. El cultiva el carácter de Cristo, consuela y empodera a los creyentes para una vida santa, y otorga dones espirituales por los cuales sirven a Dios en su iglesia. [Genesis 1:2; Juan 16:7-13; Juan 14:16-17; Hechos 1:8; 1 Corintios 2:12; 1 Corintios 3:16; 2 Corintios 3:17; Efesios 1:13; Efesios 5:18; Gálatas 5:25]

La Biblia

La Biblia es la palabra de Dios. Es la revelación de Dios mismo a nosotros y es el testimonio de Cristo quien en si mismo es el foco de esta revelación divina. La Biblia fue escrita por hombres divinamente inspirados bajo la dirección sobrenatural del Espíritu Santo y porque Dios la inspiró, es la suprema fuente de verdad sin errores en su mensaje. La Biblia revela la voluntad de Dios para salvación. Es la ultima y suprema autoridad en todos los asuntos de los que habla. [Salmo 119:105 y 160; Proverbios 30:5; Mateo 5:17-18; Mateo 22:29; Lucas 21:33; Lucas 24:44-46; Juan 5:39; Juan 16:13-15; Juan 17:17; Romanos 15:4; Romanos 16:25-26; 2 Timoteo 1:13; 2 Timoteo 3:15-17; Hebreos 1:1-2; Hebreos 4:12; 1 Pedro 1:25; 2 Pedro 1:19-21]

Hombre

En el principio el hombre era inocente del pecado y fue dotado por el Creador con libertad de decisión. El hombre utilizo su capacidad de libre elección, y decidió rebelarse contra Dios y su desobediencia trajo el pecado a la humanidad. Aunque cada persona tiene un tremendo potencial para hacer el bien, todas las personas son pecadoras por naturaleza y por decisión; y están espiritualmente muertos hasta que reciben vida eterna por medio de la salvación de Jesucristo. Las personas fueron creadas en la imagen espiritual de Dios, para ser como El en carácter. Los humanos son el objeto supremo de toda la creación de Dios; por eso, cada persona, cada etnicidad y raza, posee total dignidad, valor y es digno de amor y respeto. [Genesis 1:26-30; Genesis 2:5,7 y 18-22; Salmo 8:3-6; Isaías 6:5; Isaías 53:6; Mateo 16:26; Hechos 17:26-31; Romanos 1:19-32; Romanos 3:10-18 y 23; 1 Corintios 1:21-31; Efesios 2:1-22; Colosenses 3:9-11; 1 Pedro 2:17]

Salvación

La salvación es un regalo gratuito dado por Dios y es basado en la soberana gracia de Dios. La salvación fue comprada por Jesucristo en la cruz y esta disponible para cualquier persona, simplemente tienen que aceptarla. Nunca podremos pagar por nuestros propios pecados con buenas obras o mejoramiento personal. Solamente confiando en Jesucristo como la ofrenda de Dios para el perdón es que cualquiera puede ser salvo del castigo del pecado. Cuando nos tornamos de vivir nuestra vida a nuestra manera y elegimos a Jesús, en fe, somos salvos. La vida eterna comienza desde el momento en el cual recibes a Jesucristo como salvador por fe. [Juan 14:6; Romanos 6:23; Gálatas 3:26; Efesios 2:8-10; filipenses 2:12-13; Colosenses 1:9-22; Santiago 2:14-26; 1 Pedro 1:2-23; 1 Juan 1:6-2:11]

Eternidad

Las personas fueron creadas para existir para siempre. Vamos a existir eternamente de una de dos maneras, eternamente separados de Dios por el pecado, o eternamente con Dios por medio del perdón y la salvación. Estar eternamente separado de Dios es muerte eterna en el infierno. Estar eternamente con el es vivir eternamente en el cielo. El cielo y el infierno son lugares reales de existencia eterna. Dios, en su propio tiempo y manera, llevara al mundo a su apropiado final. De acuerdo con su promesa, Jesucristo retornara personalmente, de manera visible en su gloria a la Tierra; los muertos serán resucitados; y Cristo juzgara a todos los hombres con justicia. [Juan 3:16; Juan 14:17; Romanos 6:23; Romanos 8:17-18; 1 Corintios 2:7-9; 1 Corintios 3:10-15; 2 Corintios 5:10; Hebreos 9:27-28; Apocalipsis 20:15]

La Iglesia

La Iglesia es descrita como el cuerpo espiritual en el cual Cristo es la cabeza. Compuesta de personas que han sido redimidas por medio de Su sangre y regeneradas por el Espíritu Santo. El cuerpo se expresa en reuniones locales en la cual los miembros han sido inmersos en una confesión de fe creíble y han tomado para si mismos el vivir el gran mandamiento y completar la gran comisión de Jesús. El cuerpo se reúne junto para adorar, instruirse, evangelizar, y servir, en muchas maneras, formas y estilos, a las cuales nos referimos como congregaciones. Cada congregación a sido asignada con una tarea de Dios especifica para avanzar la visión de Su Reino y llevar la salvación cerca de las personas que están esperando por ella. Aunque nos identificamos como organización tipo iglesia, somos solamente una pequeña pieza en el gran panorama de Cristo y todas estas piezas unidas alrededor del mundo forman el ejercito que Jesús armó para traer esperanza de vuelta a la humanidad. Al final de todo, la iglesia no le pertenece a ninguna organización, grupo o persona, le pertenece a Jesucristo y va a asegurarse que cumpla su objetivo. Creemos que las ordenanzas a practicar en la iglesia local son el bautismo de creyentes por inmersión y la practica de la Cena del Señor. También creemos en la interdependencia y colaboración de iglesia locales, y sumisión mutua a otros creyentes en amor. [Mateo 16:18; Mateo 18:15-17; Mateo 22:37-40; Mateo 28:19-20; Hechos 2:41-42 y 47; Efesios 1:22-23]